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Este año, las efímeras están apareciendo antes y en mayores cantidades en Budapest, Hungría. Los investigadores creen que el reciente clima cálido y el bajo nivel del río Danubio han provocado el aumento del número de estos insectos.
Los investigadores atribuyen este fenómeno a una combinación de factores ambientales. El calor acelera el ciclo de vida de las efímeras, mientras que el bajo nivel del agua facilita su reproducción en las orillas del río.
Para ayudar a esta especie protegida a encontrar las aguas que necesita para desovar, se han instalado luces azules especiales en los puentes de la ciudad. Estas luces están diseñadas para no desorientar a los insectos y guiarlos de vuelta al río.
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